Me acuerdo cuando tenias un microeprendimiento y vendías velas. Eran las velas más feas que había visto en mi vida, y eso que no soy de ver muchas velas, no son visuales. Tus piramides de tres colores, eran las peores, pero sin embargo era de las que más vendias. No se como se te ocurio, las empezaste hacer, en cantidad y al por mayor.
Tu casa olía a parafina, y era imposible estar ahí.
Vos y tus velas, son el mejor recuerdo que tengo. Fue el mejor negocio que tuviste en tu vida.
No deberías haberlo dejado.
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Opiniones reciprocas.