Ser una en un millón.
Vine hace cuatro años atrás, deje miles de kilómetros atrás, casi una vida entera para seguir un sueño que el día de hoy lo estoy cumpliendo. Ahora pienso que me falta medio año para ser otra. Otra persona en la cual ya me convertí. Y ahora en este invierno californiano, veo el fuego, me rodeo de mi familia, y pienso, no quiero volver nunca más. Quiero quedarme en esa ciudad que me vio convertirme. Estar rodeada de esas personas que me lastimaron o que me amaron, que me ayudaron a ser quien hoy en día soy.
Se que esa decisión, es dejar ciertos sacrificios que a lo largo de la vida hice y me costaron. Pero lo que esta por venir va a valer mucho más la pena. Yo soy una agradecida, dejar una casa en la cual dejo una marca en mi, llegar a borrarla empezando con una familia que me dio absolutamente todo. Venir a la gran manzana y abrirme a ser la persona que ahora soy. Toque el cielo con las mano. Y con seguridad se que lo voy a seguir tocando. Soy una en un millón.
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